
Benicàssim viaja de nuevo a la Belle Époque
Los jardines del palacete municipal de Villa Elisa de Benicàssim se han trasladado durante tres días a la época de la Belle Époque con motivo de la celebración de Las Veladas de Villa Elisa y hemos tenido el placer que algun coche del club ha participado en el emotivo evento.
Como ha explicado la concejala de Turismo, Cristina Fernández, “ante la actual crisis sanitaria que estamos viviendo hemos programado tres actuaciones en los jardines de Villa Elisa, con todas las medidas de seguridad sanitaria, y que permitirán mantener vivo Benicàssim Belle Époque durante las fechas en las que estaba prevista la novena edición”. Así, durante los días 4, 5 y 6 de septiembre, los jardines de Villa Elisa han acogido tres actuaciones que han hecho viajar a los asistentes a finales del siglo XIX y principios del XX, época de esplendor de las emblemáticas villas situadas en el paseo Pilar Coloma de Benicàssim.
Concretamente el coche del Antic Motor Club Castelló que ha participado en el evento ha sido un precioso Ford T Phaeton del año 1926.
Los coches fabricados antes de la Segunda Guerra Mundial cuentan con una asombrosa ingeniería que evoca la edad de oro del automovilismo y se han convertido en codiciados artículos de coleccionista. Cuando el primer Ford Model T vio la luz en Dearborn, Michigan, en 1906, marcó un momento clave en la historia del automovilismo. Desde entonces y gracias al pensamiento de un hombre, el automovilismo pasó de ser un privilegio a un medio de transporte de masas.
Cuando estalló la Segunda Guerra Mundial, la producción de turismos se paralizó para centrarse en la esfera militar, por ello, los coches de preguerra que existían en el bando de las Potencias del Eje y de los Aliados merecen un capítulo a parte. Una época en la que la conducción era menos estresante, los coches eran objetos artísticos y la revolución tecnológica comenzaba a despertar.
